Nombre: TOCAT DE L’ALA 2011
Añada: 2011
Denominación de Origen: EMPORDA
Uva: SAMSÓ 40%/ GARNACHA 60%
Precio aprox.: 9,35€ en Enterwine
Sinergia,
es la palabra del momento, palabra que designa el trabajo en conjunto de dos o
más personas, cooperación, “fer Pinya” que decimos en Cataluña, trabajo en
equipo… Vamos que los palabros complicados, si son latinajos, griegadas o
sajonadas son más “cool”.
El
trabajo en conjunto o equipo, suele dar buenos resultados y la unión que nos
trae hoy hasta aquí, ha dado uno y muy bueno. Es de recibo pues, presentar a
los culpables, de primero tenemos a la bodega Roig i Parals, bodega familiar que data de finales del siglo IXX
punto de inflexión, para convertirse en lo que son hoy, ya que como la mayoría
de bodegas de aquella época, sufrió el ataque de la filoxera, obligándolos a
trasladarse a Francia para trabajar y poder sobrevivir, concretamente en la
región del Rosellón. En 1890 cuando
la familia Roig i Parals decide
volver a plantar en su finca, ya que la solución había llegado en forma de
plantas más resistentes injertando cepas americanas, decidieron traer desde Francia estos injertos, de las
variedades Carignan (Samsó en
Catalán, Cariñena el resto de España) que a día de hoy se siguen cultivando.
Hoy en día son referentes en el Empordà,
como modelo de tradición y respeto por la tierra.
Los
otros culpables son Coca i Fito, los
hermanos Toni y Miquel crecidos entre agricultores y viñedos en el Alt Penedés, en el 2006 deciden empezar
la elaboración de vinos en la
DO Montsant bajo el nombre de Coca i Fito. Toni ya
había trabajado en el mundo del vino como director técnico y consultor de
pequeñas bodegas en todo el ámbito Catalán, Miquel está formado como cocinero y comercio exterior siendo su
parte la de imagen y comercialización de la bodega.
Tenemos
pues por un lado, elaboradores de tradición en la D.O.
Empordá y dos
hermanos emprendedores, antigüedad y futuro, tradición y modernidad, pasión por
una sola idea, El Vino.
Con
esta ensamblaje solo puede salir una cosa, un vinazo que decimos los mundanos y
así es, al menos a mí me han convencido, expresión de un terruño moderna,
dinámica, Samsó de viñas de entre 40 a 90 años y Garnacha de viñas de entre 30 a 100 años, una virguería!
Si nos
fijamos en la etiqueta, han intentado dar un toque de desenfado a este vino, toda
la seriedad queda dentro y entre ellos, en esta etiqueta vemos a un hombre de
pantalones andrajosos, tupe al viento, esmoquin o chaqué, paraguas al hombro y
haciendo malabares subido a un monociclo, un “tocat de l’ala” o loco de
atar que se diría en el resto del país, simpático personaje, que visto de lejos
asemeja la figura a la de un Fauno.
Fijándonos
en el personaje de la etiqueta, vamos a entender muy bien este vino, corte
moderno y desenfadado, pero como el personaje indica, tan antiguo como el mundo
mismo, antigüedad que aporta arraigo al terruño, a las variedades y a la
bodega. Vino joven, con cuatro meses de barrica, con dos variedades bien
ensambladas y con mucho trabajo detrás, porque para llegar a la locura, primero
se ha de pasar por la excelencia.
Vamos
pues a ver que esconde este loco, bajo su Chaqué.
En copa
viste un “chaqué” rojo picota intenso y profundo con tonos violáceos tirando a
purpura, con una bonita caída de lagrima.
En
nariz es intenso y grueso, amplio en frutos rojos, regaliz, especias y
sotobosque, adopta ciertas trazas animales, como a piel de animal salvaje, muy
interesante! Hinojos y lilas lo complementan.
En boca
se desata, frutos rojos punzantes, muy balsámico, le salen las notas de
caramelo aportadas por la madera, chicle de fresa, frambuesas y zarzamora, muy
golosillo! En segundo plano aparecen especias, algo licoroso, pequeño deje de
cacaos, una juerga de vino! La acidez mas que correcta, de las mejores que he
encontrado este año, cosa que dota a
este vino de mucho equilibrio, para estar encima de un monociclo se ha de tener
y mucho… los taninos están muy pulidos, cosa que no me sorprende.
Resumiendo,
una juerga de frutas al paladar, apoyada de especias, bálsamos y
sotobosque, muy serio, acidez y los
taninos perfectos, mucho trabajo detrás, en equipo, bien hecho y una expresión
de ambas variedades impagable, si porque el precio para lo que nos da este
vino, es más que justo.
Vino
que repetiré mas adelante, esta “sinergia” me ha convencido y mucho, buen
futuro. Vosotros podéis ir a buscarlo y quedar bien con la familia, yo lo probé
en familia y con una paellita que no se la saltaba un galgo, el conjunto fue
inmejorable, con carnes a la parrilla o embutidos con “Pa amb Tomaquet”,
excelente! Disfrutadlo porque yo
Ya lo
he hecho!
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